Dr. Paul Tejada Pérez - Profesor Instructor de la Cátedra de Clínica Anestesiológica Universidad Central de Venezuela, Hospital Universitario de Caracas
Miembro Titular Sociedad Venezolana de Anestesiología (SVA)
Miembro del Capitulo de Anestesia Obstétrica de la SVA.



Definición

El Sufrimiento Fetal Agudo (SFA), es un término comúnmente empleado para identificar una emergencia Obstétrica, en algunas ocasiones resulta impreciso e inespecífico, asociado con la obtención de un producto en buenas condiciones. Comúnmente hay tendencia al intercambio o confusión de los conceptos de Sufrimiento Fetal por Asfixia Fetal.

El concepto de SFA aceptado en la actualidad es el propuesta por Parer JT1, definiéndolo, como: "aquella asfixia fetal progresiva, que, si no es corregida o evitada, provocará una descompensación de la respuesta fisiológica, desencadenando un daño permanente del Sistema Nervioso Central (SNC), falla múltiple de órganos y muerte."

La palabra Asfixia, derivada de la composición de a- sin y el griego sphydsein- palpitar, según el Diccionario Terminológico de Ciencias Médicas Salvat2 literalmente se interpreta como falta de pulso, pero es empleada como "supresión de la función respiratoria, por cualquier causa que se oponga al cambio gaseoso en los pulmones entre la sangre y el aire ambiente".

En Perinatología, esta expresión es orientada para los casos de acidosis proveniente de hipoxia intrauterina, súbita o progresiva3.

Para Dellinger EH, con fines de interpretación del monitoreo fetal electrónico (MFE) la salud fetal puede dividirse en tres etapas: normal, de estrés y de sufrimiento, siendo el período de estrés, aquel que corresponde a una amenaza temprana del bienestar fetal, con signos de advertencia de que el producto se encuentra en un ambiente potencialmente dañino4.

La clasificación internacional de enfermedades, concluye que el término a usar es el de Hipoxia intrauterina (siglas P20), el cual abarca los vocablos siguientes en la tabla.

Vocablos englobados y exceptuados en el Diagnóstico de Hipoxia intraútero
Incluye
• Acidosis,
• Anoxia,
• Asfixia,
• Hipoxia,
• Sufrimiento
 --> (Fetal o intrauterino)
• Frecuencia cardíaca fetal anormal
• Líquido meconial
• Pasaje de meconio
Excluye Hemorragia intracraneal debida a hipoxia o anoxia

Epidemiología

La incidencia de una asfixia fetal intraparto que genere una acidosis metabólica significativa al momento del nacimiento es de aproximadamente un 20 a 25 por 1.000 nacidos vivos, o en otros número, es un 2% de los nacidos vivos. En muchos de estos embarazos el feto presentó solo una asfixia leve sin disfunción o daño cerebral, mientras que de 3 a 4 neonatos por 1.000 nacidos soportaron incidentes de asfixia moderada o severa conllevando a encefalopatía neonatal y daño a otros órganos5. Dentro del segmento de asfixia severa 1 por 1.000 nacidos pueden tener daño cerebral, corroborado como hallazgo neuropatológico postmorten (necropsia) a una muerte fetal o neonatal precoz, o como deterioro cognitivo y/o motor en la evaluación de un infante sobreviviente.

En Venezuela para el año 2001 fueron registrados 547.000 nacidos vivos, con una tasa de mortalidad infantil de 17,66 por 1.000 nacidos vivos, la mortalidad neonatal representó el 53% de esta cifra. Dentro de las causas de muerte neonatal en primer orden son señaladas "ciertas afecciones del periodo Perinatal", dentro de este segmento la hipoxia intrauterina y asfixia totalizaron en cifras absolutas 531 fallecidos, pero no se cuentan con el número de neonatos sobrevivientes a situaciones de sufrimiento fetal, y mucho menos la magnitud de las secuelas que presentan.


Etiología

Las causas de sufrimiento fetal, están relacionadas fundamentalmente con una interrupción tanto del aporte de Oxígeno y nutrientes al feto como la eliminación de los productos metabólicos de este. Pueden presentarse de manera única o múltiple, y de inicio lento progresivo o repentino6. Examinando su origen, pueden dividirse en cuatro grupos a saber: Maternas, Placentarias, Funiculares y Fetales y a su vez, estas pueden subdividirse, dependiendo de su elemento desencadenante.

Etiología del SFA
TIPO CAUSAS EJEMPLOS
Maternas • Hipotensión
• Hipovolemia
ò del aporte de O2
• Enfermedad Vascular
• Vasoconstricción de Art. Uterina
• Compresión Aorto-Cava, Bloqueo Simpático
• Hemorragia, Deshidratación
• Hipoxemia, Anemia
• Hipertensión Inducida por el Embarazo (HIE), Diabetes, Lupus Eritematoso Sistémico (LES)
• Catecolaminas (exógenas, endógenas), Alfa adrenérgicos
Placentarias • Hipertonía Uterina • Hiperestimulación Oxitócicos, DPP
Funiculares • Compresión, Procidencia,
• Vasoconstricción Vena/Arteria
• Oligoamnios, Circulares y/o nudos del cordón
• Hematomas, Trombosis
Fetales • Anemia, Arritmias  


Respuesta Fisiológica a la Asfixia

La hipoxemia e hipercapnia es la manifestación en fetos sometidos a un episodio de asfixia, si la hipoxemia es prolongada aumenta la hipoxia, conllevando a un metabolismo anaeróbico, facilitando así la producción de ácido láctico y acidosis metabólica.

Una respuesta fisiológica inicial, es la disminución de los movimientos fetales y respiratorios fetales, en un esfuerzo por disminuir el consumo de Oxígeno7. Cuando la hipoxia y la acidosis pasan a ser severas, se presenta una disminución de la contractilidad miocárdica y del gasto cardiaco, progresando hacia vasoconstricción e hipoperfusión de órganos blancos, hipotensión, bradicardia, lesión neurológica, falla multiorgánica y muerte.

Cuando la hipoxia es tolerada de manera crónica, se genera una redistribución del flujo sanguíneo, manteniendo el aporte al sistema nervioso central y corazón, mediante una disminución en Riñón, tejido esplácnico y músculo, induciendo a situaciones como retardo del crecimiento intrauterino (RCIU) y Oligoamnios8.

Una sencilla y buena valoración de que el eje Cardiovascular-SNC permanezca saludable, es un trazado normal de Frecuencia Cardíaca Fetal (FCF).

En el período primario de instalación de la hipoxemia, ocurriría una vasodilatación cerebral. Un estudio doble ciego sobre un grupo de fetos durante el trabajo de parto, empleando Oximetría Fetal y Doppler, observaban una reducción en la saturación de oxígeno con un incremento en el Flujo Sanguíneo Cerebral (FSC), esto confirmaría la respuesta fisiológica a la hipoxemia9.

Los fetos expuestos a asfixia importante pero con un adecuado FSC, presentan solo cambios menores en el metabolismo energético del cerebro, no alterándose las concentraciones de Adenosintrifosfato (ATP), glucosa y glucógeno, con una ligera disminución en la Fosfocreatina (PCr), y discreto a moderado aumento en las concentraciones de ácido láctico10. Pero cuando fleja la función cardiovascular y compromete el FSC, las modificaciones en la química cerebral son más dramáticas, observándose considerables reducciones en la PCr, ATP, glucógeno y glucosa, con marcado crecimiento en los valores de ácido láctico.

La importante disminución de ATP y PCr asociadas a elevadas cifras de ácido láctico, son fuertemente relacionadas con lesión cerebral, todos los modelos de investigación expuestos a niveles entre 17 a 20 mmol/gr. de ácido láctico, exhibieron daño cerebral9.

Un aspecto a resaltar, es la relación entre producción de ácido láctico, glicemia y daño neurológico. En animales de experimentación sometidos a períodos de anoxia, fueron hallados elevados niveles de ácido láctico en cerebros de fetos con hiperglicemia en comparación con el grupo euglicemico, clínicamente, el mayor número y severidad de lesiones neurológicas ocurrían en la población hiperglicémica9.

Estos cambios de tipo metabólicos, son los que pudieran de alguna manera explicar, por que algunos neonatos nacidos con un puntaje de Apgar bajo no llegarían a desarrollar lesión neurológica, posiblemente por tres hipótesis:

  1. Feto hipóxico, pero nunca el cerebro estuvo anóxico.
  2. Feto con breve anoxia, pero con limitada acumulación de ácido láctico.
  3. La anoxia cerebral, no produjo una cantidad de ácido láctico superior al umbral.

Otro aspecto a evaluar en la aparición de lesión neurológica post-hipoxia, es el comportamiento de ciertos sectores de neuronas en el cerebro, pudiendo ser las del hipocampo más sensibles a los cambios de isquemia y perfusión que las de otras áreas11.


Diagnóstico de SFA

Las Pruebas empleadas para determinar SFA, pueden dividirse según el período del parto en el cual se aplican, en Pre-parto, Intraparto y Post-parto5.

Periodos del parto y pruebas generalmente empleadas

PERIODO PRUEBA
Preparto Monitoreo fetal no Estresante
Monitoreo por contracciones uterinas o estresante
Perfil Biofísico
Estimulación Vibroacústica
Ultrasonido Doppler
Intraparto Monitoreo Electrónico Continuo de la FCF
Auscultación Intermitente de la FCF
Oximetría de Pulso Fetal
pH sanguíneo cuero cabelludo Fetal
Pos-parto Apgar
Gasometría Cordón Umbilical
Pruebas Neuroconductuales

1- Pre-parto

1.-  Prueba No Estresante

Este estudio cuyas siglas en ingles son NST (Non Stress Test) observa la capacidad de incrementar la FCF asociada a movimientos fetales. El descarte de una lesión neurológica en ausencia de hipoxia y acidosis constituye el fundamento de esta técnica. Por el contrario la ausencia de estas elevaciones de la FCF, pudiese estar asociada a hipoxemia pero también a otras situaciones como, ciclo de sueño fetal, o efectos de drogas (narcóticos, barbitúricos, beta-bloqueantes).

El registro de por lo menos dos episodios de aceleración de la FCF superior a 15 latidos por minuto con una duración mayor a 15 segundos durante un periodo de observación de 30 minutos asociados a movimientos fetales, es denominado prueba reactiva. Por el contrario, el no alcanzar los parámetros antes mencionados, es llamada prueba no reactiva. Estas observaciones pueden repetirse hasta por dos periodos12.

Las pruebas reactivas tienen una mortalidad perinatal aproximada de 5/1000, mientras que las no reactivas es de 30 a 40/1000. Como desventaja, las pruebas no reactivas tienen una alta tasa de falsos positivos, ubicándolas entre 75% a 90 % aproximadamente.

2.-  Prueba Estresante

Esta especie de prueba de esfuerzo conocida por sus siglas en inglés CST (Contraction Stress Test), es basada en la adecuada recuperación de la FCF posterior a una contracción uterina, la cual generaría una interrupción temporaria del flujo sanguíneo del espacio intervelloso conllevando a una disminución del aporte de oxígeno al feto siendo tolerada en aquellos que presentan buena reserva del mismo. Por intermedio de este procedimiento se corrobora la capacidad del feto a tolerar un trabajo de parto10.

Con la paciente colocada en posición de semi-Fowler, en decúbito lateral izquierdo, y registrando durante un periodo de 20 minutos, presión arterial, contracciones uterina y FCF, se procede a inducir contracción del útero, bien con Oxitocina exógena o endógena (masajear la glándula mamaria), para tratar de llegar a 3 contracciones de 40 segundos en un periodo de 10 minutos.

Los resultados aportados pueden ser interpretados de la siguiente manera:

Prueba Estresante, Calificaciones, Hallazgos e Interpretación
Calificación Hallazgo Interpretación
Negativo No hay Desaceleraciones tardías en 3 contracciones en 10 minutos. Normalidad
Positiva Desaceleraciones tardías seguidas de cada contracción Riesgo Aumentado de muerte intraútero
Dudosa Desaceleraciones tardías con menos del 50% de las contracciones Repetir Prueba
Insatisfactoria Trazado de pobre calidad o no se alcanzan 3 contracciones/10 min. Repetir prueba

Como mayor desventaja de esta prueba, es la presencia de un 30% de falsos positivos y lo poco practica de su realización13.

3.-  Perfil Biofísico (PBF)

Este examen ampliamente aplicado en Obstetricia, correspondería a una especie de Apgar intraútero, mide cinco parámetros como son: Movimientos Respiratorios, Movimientos fetales, Tono Fetal, Volumen de Liquido Amniótico y Monitoreo Fetal No estresante, la presencia de normalidad en una de estas variables, es valorada con 2 puntos, mientras que la ausencia corresponde con 0 puntos. Pudiéndose establecer un cierto patrón de acuerdo al puntaje obtenido, 8-10 Normal (sin asfixia); < 6 es especifico, sensible y altamente predictivo indicador de acidosis fetal en cordón umbilical14.

Perfil Biofísico, situaciones y puntajes
Parámetro Normal (2 ptos) Anormal (0 ptos)
Prueba NST Reactiva No Reactiva
Mov. Respiratorio Fetal Al menos 1 de 30´´ en 30 min. Ausencia
Mov. Corporales Fetal 3 en 30 min. <2 en 30 min.
Tono Fetal Extremidades sup. e inf. en completa flexión, cabeza sobre tórax Extremidades en extensión o flexión parcial
Liquido Amniótico ILA 5 cm. ILA < 5 cm.

Este estudio no es 100% sensible, sin embargo Manning y colaboradores15 examinando 19.221 embarazadas, reportan una probabilidad de muerte fetal de 0.726 por 1000 pacientes con un PBF normal (exactitud de un 99.2%), confiriendo una alta probabilidad de sobrevida fetal.

4.-  Estimulación Vibroacústica

Este análisis establece la variación de la FCF ante determinados estímulos vibratorios y auditivos. Empleando una laringe artificial que genera una intensidad acústica de 12 dB con 80 Hz. frecuencia y una armónica entre 20 a 9000 Hz16. Su mayor uso esta destinado para el acortamiento de la prueba no estresante o como soporte en aquellos resultados no reactivo17. La edad gestacional puede modificar el resultado de esta exploración.

5.-  Doppler

Este sistema para medir el flujo sanguíneo tanto en el feto como en la circulación útero-placentaria, aporta datos primordiales de la perfusión, siendo empleado tanto para el monitoreo de medidas terapéuticas como prediciendo posibles resultados perinatales.

La finalidad de utilizar sistema Doppler, está dada para precisar los cambios de flujos en órganos de alta perfusión (corazón, suprarrenales y cerebro), en los cuales se presenta un patrón precoz de redistribución de circulación, característico de la hipoxia y asfixia.

Su sensibilidad y especificidad han sido evaluadas desde hace más de una década, Tyrrell y colaboradores18, estudian la relación entre las ondas al final de la diástole en arteria umbilical (preoperatorio) y el pH, PCO2 de vena umbilical (tabla), donde establecen la efectividad de la evaluación Doppler, ratificando que fases diastólicas borradas o fases diastólicas en reverso son indicadores de resultados perinatales adversos. Actualmente es mandatoria su aplicación en gestantes con patologías que implican cambios vasculares.

Especificidad, sensibilidad y valores predictivos del Doppler en de Hipoxia y Acidosis
  Hipoxia % Acidosis %
Sensibilidad 78 90
Especificidad 90 92
Valor predictivo positivo 88 53
Valor predictivo negativo 98 100

2- Intraparto

Monitoreo Electrónico Continuo de la FCF

Este procedimiento empleado desde hace mas de dos décadas, permanece como la más básica modalidad para detectar compromiso fetal durante el trabajo de parto. Aplicando dos transductores en la región abdominal materna, permite la medición no invasiva de tres variables en la actividad cardiaca fetal, como lo son:

• Frecuencia Basal
• Variabilidad
• Cambios Periódicos

los cuales proveen una evaluación indirecta del estado fetal.

Gráfico

Mediante el registro sobre papel, son observadas en la banda superior (canal), la FCF continua en latidos por minutos (lpm) y en la banda inferior la actividad uterina (mmHg.), a diferencia de los métodos invasivos este sistema puede ser utilizado con membranas intactas o cuando la presentación fetal no esta accesible.

a) Frecuencia Cardiaca Fetal Basal

Los valores normales FCF (Basal) oscilan entre 120-160 lpm. Cuando la FCF esta por encima de 160 lpm se le denomina taquicardia, mientras que bradicardia corresponde a cifras inferiores a 110 lpm. Asociando esta terminología con periodos o momentos en el tiempo podemos definir los conceptos de aceleraciones y desaceleraciones.

Taquicardia

Establecida como el incremento en la FCF basal mayor a 160 lpm con duración de D 10 minutos, puede originarse por condiciones fetales o maternas.

Causas de Taquicardia Fetal
Fetales Infección, Hipoxemia, anemia, Prematuridad (menos de 26 o 28 semanas de gestación), arritmia cardiacas y anomalías congénitas
Maternas Fiebre, deshidratación, infección, Hipertiroidismo, Terbutalina, Ritodrina, Atropina
La fiebre materna, en donde situaciones como la Corioamnionitis suele aparecer primero la taquicardia fetal que la fiebre en la madre.

Bradicardia

Definida como la disminución de la FCF por debajo de 110 lpm en un periodo de tiempo D 10 minutos, puede ser consecuencia de actividad vagal o el resultado de hipoxia fetal resultante de la imposibilidad de mantener un incremento compensatorio del volumen latido.

La bradicardia puede causar hipoxia o puede ser resultado de hipoxia. La severidad, duración y la presencia o ausencia de Variabilidad son componentes críticos para la interpretación e identificación de hipoxemia fetal.

Bradicardia y Analgesia del parto

Hay un número de causas no relacionadas a hipoxia, dentro de estas se encuentran la enfermedades cardiacas congénitas (ejemplo, trastornos de la conducción), drogas (Betabloqueantes) o hipotermia. Otra condición asociado a bradicardia, es la colocación de opioides en el espacio intratecal para analgesia del trabajo de parto, (técnica combinada espinal-epidural).

Mediante el empleo de un tocodinamómetro externo, Clarke y colaboradores19, observaron en 9 parturientas de un grupo de 30, una disminución de la FCF menor a 100 lpm en los primeros 10 minutos de recibir fentanyl Subaracnoideo, como parte de la analgesia obstétrica, de las 9 pacientes con episodios de bradicardia, 2 fueron sometidas a cesárea segmentaria de emergencia. Un estudio realizado por Palmer20, en donde un Perinatólogo analiza de manera ciega registros de trazados en la FCF, 30 minutos antes y después de la colocación de fentanyl para analgesia durante la fase activa del trabajo de parto, en dos espacios anatómicos diferentes, intratecal o epidural presentando una incidencia de bradicardia del 12% para el primero y 6% en el segundo respectivamente, sin embargo estos porcentajes no fueron estadísticamente significativos, como tampoco se evidenciaron condiciones neonatales adversas en aquellos fetos con eventos de bradicardia en cotejo con los de trazado normal.

No solamente con el fentanilo se han observado estos incidentes, Gambling y col21, examina a dos poblaciones de parturientas, una empleando Sufentanil intratecal para analgesia obstétrica con la técnica combinada espinal-epidural (CSE) y otra con Meperidina intravenosa, reportando que 8 embarazadas de 400 (2%) con la CSE, eran sometidas a cesárea segmentaria de emergencia por bradicardia fetal profunda en ausencia de hipotensión, definida esta como una FCF menor a 60 lpm con una duración mayor o igual a 60 segundos, esta situación apareció en el 90% de los casos en los primeros 30 minutos posterior a la colocación del opioide y un 10% a la hora, ningún caso fue referido en la población con Meperidina. Para el mismo estudio la aparición de desaceleraciones no fue estadísticamente significativa entre ambos grupos, 18% en CSE y 21 % para Meperidina, es importante destacar que el monitoreo fetal empleado fue tanto por auscultación intermitente con Doppler (Meperidina) como FCF electrónica continua.

Una investigación retrospectiva realizada por Van de Velde y col22, evaluó 1.293 parturientas, con embarazo simple, normal a termino, quienes recibieron alguna de estos tres grupos de técnicas, Sufentanil intratecal (CSEsuf); Bupivacaína + Sufentanil + Adrenalina intratecal (CSELA) y analgesia epidural estándar (EPI), señalando que el grupo CSEsuf tuvo mayor cantidad de registros anormales de FCF e hiperactividad uterina. Si bien para los autores este hallazgo es importante, consideran que estos eventos sean muy poco probables que ocasionen morbi-mortalidad y materna o neonatal.

Para Holdcroft y Dob23, si bien existen los reportes de bradicardia fetal, este no es un fenómeno peculiar del Sufentanil, el bajo número de eventos reportados en el universo de parturientas aplicado, además de fenómenos que no son controlados como errores en la infusión de oxitócicos tanto en bolos como en bombas, deben considerarse antes de emitir un juicio de total relación causa efecto.

Un estudio que trata de explicar este fenómeno es el de Segal y col24, quienes con fibras miometriales extraídas de ratas preñadas, plantean como posible mecanismo desencadenante una alteración del equilibrio entre las catecolaminas adrenalina y noradrenalina producidas durante el trabajo de parto, desequilibrando los efectos tocolítico (adrenalina) y oxitócico (noradrenalina) respectivamente, hipotéticamente un opioide intratecal o epidural disminuiría significativa y bruscamente los niveles de adrenalina, quedando noradrenalina en mayor proporción la cual ocasionaría una hiperestimulación uterina transitoria conllevando a bradicardia fetal.

Por el contrario, experimentalmente se ha señalado que Fentanilo y Meperidina a dosis 3 veces las por encima de las empleadas en la practica clínica pueden reducir la contractilidad de fibras miometriales, lo cual descartaría un efecto oxitócico directo de estos opioides25, y apoyaría otras teorías como la de Segal.

Aparte de la sobre-estimulación uterina, existen otras hipótesis que tratarían de explicar la bradicardia fetal inducida por Sufentanil intratecal, entre estas son señaladas las siguientes: un efecto vagotónico directo sobre el feto, e hipoperfusión útero-placentaria secundaria a hipotensión arterial, bien por un efecto directo o por la supresión brusca de catecolaminas.

Hasta ahora, no esta claro él o los mecanismos de estos cambios en la FCF, pero existen evidencias de un posible riesgo de bradicardia fetal cuando se inicia analgesia obstétrica con fentanyl o sufentanil intratecal (con o sin anestésicos locales)26, muy por el contrario a cuando son usados por vía epidural27.

b)   Variabilidad

La FCF es monótona, pero frecuentemente presenta ligeros aumentos o descensos en el latido-latido, estos cambios normales son influenciados por actividad del simpático y parasimpático respectivamente. Estas variaciones conducen a la variabilidad de la FCF(VFCF), que posiblemente, sea una respuesta instantánea para modificar el gasto cardiaco ante situaciones que percibe el feto28, considerándose como un funcionalismo normal dependiendo del número de apariciones por unidad de tiempo.

Clase Variación(lpm)
Mínima 0 a 5
Moderada 5 a 25 (normal)
Marcada > 25
Una bradicardia fetal con variabilidad moderada puede ser signo de normalidad.

Entre las condiciones que pueden desarrollar disminución de la variabilidad están: el feto durmiendo, el paso de drogas depresoras del SNC (Opioides, Barbitúricos, Benzodiazepinas, Fenotiazinas), drogas parasimpaticolíticas (Atropina, Escopolamina), igualmente drogas ilícitas pudiesen originar similar efecto sobre la variabilidad. Cabe señalar que mucho de los efectos desaparecen 20 a 30 minutos posteriores a la administración intravenosa17.
Bradicardia y riesgo de Acidosis Fetal
Estado FCF lpm Variabilidad Causas
Sin Acidosis 110 a 80 Mínima o moderada Bradicardia Idiopática,
Bloqueo congénito
Posible Acidosis 80 a 60 Mínima o moderada  
Acidosis < 60 Perdida de variabilidad dentro de los 3 minutos de inicio de la bradicardia Prolapso del cordón, ruptura uterina, Desprendimiento de placenta
Realizado de la referencia29

c)   Cambios Periódicos.

Los cambios periódicos son alteraciones de la FCF vinculadas al tiempo, dividiéndose en dos categorías: aceleraciones y desaceleraciones.

Las aceleraciones, constituyen incrementos regulares por encima del valor basal de la FCF, son observadas con movimientos fetales espontáneos o provocados, e interpretadas como adecuada oxigenación y bienestar fetal.

Las desaceleraciones, corresponden a descensos de la FCF relacionado con la contracción uterina, dividiéndose en temprana, variable y tardía.

Los cambios periódicos pudiesen involucrar una serie de patrones de desaceleraciones30.

c.1.) Desaceleraciones Tempranas.

Representadas como una disminución gradual de la FCF, coincidiendo su aparición y finalización con el principio y fin de la contracción uterina, raramente causan caídas mayores a 30 lpm de la línea basal o FCF menores a 100 lpm. Son mediadas por estimulación Vagal central, ocasionadas por un incremento en la presión intracraneal (PIC) debido a compresión de la cabeza fetal, cursan con pH fetal y puntajes de Apgar normales, están consideradas como benignas.

c.2.) Desaceleraciones Variables.

Corresponden a caídas bruscas en la FCF con relación variable a la contracción uterina. Son inducidas por un mecanismo baroreceptor mediante la compresión del cordón umbilical, primero, la oclusión de la vena umbilical genera hipotensión y taquicardia refleja, igual situación en las arterias umbilicales provoca una elevación en la post-carga, condicionando a bradicardia por reflejo en los baroreceptores aórticos y carotídeos, al terminar la compresión revierte el patrón.

Pueden observarse en el Oligoamnios, posición anormal del cordón y movimiento fetal.

Si están presentes de manera aislada son consideradas benignas, pero si inducen a taquicardia y modificación de la variabilidad, serian indicativas de hipoxia y pronta resolución quirúrgica.

1.-  Desaceleraciones Tardías.

De aparición gradual con el inicio de la contracción, su máximo nivel es alcanzado tardíamente con relación al umbral de la contracción. Generalmente, expresan un desbalance entre la oferta y demanda de un miocardio necesitado de oxigeno. El umbral de oxígeno para la aparición de la desaceleración dependerá del estado fetal previo, como en el caso de un retardo del crecimiento intrauterino, en el cual la mínima variación de oxigeno desencadenará la aparición de la misma. Regularmente son consideradas indicaciones para cesáreas.

Mecanismo de la desaceleración variable en la hipoxia fetal
É Disminución de la Transferencia de O2 al feto
Estimulación  

Quimiorreceptor à Respuesta a -Adrenérgica à Hipertensión fetal







Miocardio Hipoxémico
ð Estimulación
â
Baroreceptor
â
Respuesta Parasimpático
â
Desaceleración
Realizado de la Referencia 31

Mecanismo de la desaceleración Tardía en la hipoxia fetal
É Oclusión de la Arteria Umbilical
                    Estimulación                          Estimulación
Hipoxemia Fetal à Quimiorreceptor Fetal à Centro Vagal à Desaceleraciones FCF
Ä Miocardio Hipoxémico È
Realizado de la Referencia 30

FCF, Variabilidad, Cambios Periódicos y Acidosis fetal
Condición FCF Variabilidad Cambios Periódicos Causas
Sin Acidosis Normal Mínima Sin desaceleraciones Opioides, MgSO4, barbitúricos, anestésicos, Prematuridad, sueño fetal
Posible Acidosis Recurrentes
Taquicardia
Bradicardia
Mínima ó moderada Recurrentes
Variables ó Tardías
 
Acidosis Persistentes
Taquicardia
Bradicardia
Mínima ó ausente Persistentes
Variables ó Tardías
Acidemia metabólica
Realizado de la referencia 28

Cambios en la FCF intraparto y posibles causas
FCF Variaciones Clasificac. Causas
Basal >160 lpm Taquicardia Atropina, Terbutalina, hipoxemia, fiebre materna, Adrenalina.
120 - 160 lpm Normal  
<120 Bradicardia Hipoxemia, Opioides Epidurales o intratecales, hipertonía uterina, ¿Agonistas Alfa(Clonidina)?
Variabilidad 0 - 5 lpm Mínima Feto "dormido", opioides, barbitúricos, Benzodiazepinas, Fenotiazinas, drogas de abuso.
3 - 25 lpm Normal  
> 25 lpm Marcada Atropina.
Desaceleraciones Temprana Aumento de la PIC, estímulo vagal central.
Variable Oligoamnios, compresión del cordón, movimiento fetal, estímulos de barorreceptores, hipoxia.
Tardía Hipoxia
Realizado de la referencia 28

Algunos estudios han cuestionado el empleo del monitoreo electrónico continuo de la FCF por presentar cambios sin relación con hipoxia intrauterina derivando a cesáreas innecesarias, por el contrario los errores en la interpretación de trazos en el cardiotocograma pudiesen retardar la cirugía contribuyendo al desarrollo de la asfixia. Un equipo que puede analizar de manera automática las modificaciones en el segmento ST del cardiograma es presentado como más exacto en detectar cuadros compatibles con hipoxia fetal, disminuyendo así los falsos positivos y riesgos de intervenciones. Las elevaciones del segmento ST y/o elevación de la onda T son corroboradas con pH de arteria umbilical menor 7.15 e incremento del Exceso de Bases por Wesgate J y colaboradores32.

Una experiencia clínica en tres hospitales de Suecia por un periodo de 18 meses, aplicando en el intraparto en aquellos casos susceptibles de eventos de hipoxia, presenta la ventaja del cardiotocograma con análisis de la onda ST, mostrando una reducción significativa en la incidencia de neonatos con lesión neurológica33.

2.-  pH sanguíneo del Cuero Cabelludo Fetal.

La presencia de un resultado igual o menor a 7.20 de este análisis, probablemente es un buen indicador de acidemia fetal, y mucho mayor si a la estimulación de la cabeza fetal no se observan aceleraciones en la FCF. Hoy día este procedimiento tiende a ser desplazado por la Oximetría Fetal34.

3.-  Saturación de Oxígeno Fetal.

Para algunos investigadores, esta revolucionaria forma de evaluación fetal, no invasiva, es mas completa y satisfactoria que el Monitoreo Electrónico de la FCF y la medición del pH en el cuero cabelludo fetal, siendo un valor inferior al 30% mantenido por mas de 10 minutos, indicativo de SFA13.

Un estudio multicéntrico, prospectivo y aleatorio, aplicado como un método alternativo en parturientas con patrones de FCF no reactivos, comparándose contra monitoreo electrónico de la FCF solo, presentó una reducción mayor a un 50% de la tasa de Cesáreas (estadísticamente significativo), sin incrementar resultados adversos feto-neonatales, para el grupo con registro de la saturación fetal35.

4.-  Meconio.

La presencia de líquido amniótico teñido con meconio, es una observación clínica de bienestar fetal, no obstante este incidente no es un signo confirmatorio de SFA por si solo, puede considerarse como un fenómeno fisiológico presente en muchos partos (hasta 47%)36, el meconio puede inducir potenciales riesgos a la vida neonatal, como es el síndrome de aspiración de meconio (SAM), grave cuadro que se acompaña de una alta tasa de mortalidad.

d)   Post- parto.

Es importante la evaluación inmediata del recién nacido, el puntaje de Apgar es una antigua pero buena escala para valorar el estado clínico del neonato y "proceder" o no con maniobras de resucitación inmediatas. Identificando la población de alto riesgo para injuria neurológica, falla multiorgánica o muerte, cuando esta por debajo de 5 puntos a los 10 y 20 minutos37.

La realización de gases sanguíneos en el cordón umbilical es útil para reafirmar la presencia o ausencia de asfixia Perinatal y severidad, teniendo en consideración como sospechosos a aquellos valores de pH por debajo de 7.2038, estimando que la Media en la arteria umbilical oscila de 7.26 a 7.28. El Exceso de Base es un parámetro obligatorio para el diagnóstico de hipoxia intrauterina, niveles por encima de 12mmol/L39 son considerados como asfícticos.

La relación de valores de gases del cordón umbilical con lesiones neurológicas y/o trastornos a otros órganos, es establecida por Goodwin y colaboradores40, examinando 129 neonatos a termino, sin anomalías, con cifras de pH por debajo de 7.00 en arteria Umbilical. Encontrándose que la acidemia es un factor altamente predictivo de evoluciones tórpidas, siendo la concentración de Hidrogeniones directamente proporcionales a la aparición de disfunciones neurológicas y multiorgánicas, pronostico que no puede ser proyectado por el puntaje de Apgar.

Valores de pH en Arteria Umbilical y Porcentajes de Morbilidad Neonatal
pH % Encefalopatía
Hipóxica-Isquemi
% Trastornos
Renal Cardiaco Pulmonar Ninguno
6.90 - 6.99 12 16 18 12 75
6.80 - 6.89 33 26 30 30 48
6.71 - 6.79 60 53 60 47 40
6.61 - 6.61 80 60 60 60 20
Realizado de la referencia 17

Un estudio innovador es el valor de la relación lactato: creatinina en orina, de manera precoz identificaría a los neonatos con alto riesgo de encefalopatía hipóxica, un índice por encima de 0.64 a las 6 horas de vida post-natal, es considerada positiva con una Sensibilidad del 94% y Especificidad del 100%41.

La presencia de acidosis en arteria umbilical (Exceso de Base ³ a 12 mmol/L) y aparición de complicaciones como encefalopatía, trastornos cardiovasculares, respiratorios o renales en el neonato, generan una clasificación de la asfixia fetal en leve, moderada o severa.

Clasificación de la Hipoxia intrauterina
  Acidosis Metabólica al nacimiento Encefalopatía Complicaciones Cardiovasculares, respiratorias y renales
Menor Leve Severa Menor Moderada Severa
Leve Presente Presente o ausente   Presente o ausente    
Moderada Presente   Presente     Presente o ausente
Severa Presente     Presente   Presente

Reanimación Fetal

Existen una serie de maniobras que en ciertas situaciones pueden evitar una Cesárea, o retrasarla con el fin de ganar tiempo para una mejor preparación pre-operatoria sin producir resultados neonatales adversos. Dentro de ellas tenemos las siguientes:

1. Modificación de la Posición Materna, decúbito lateral izquierdo.

La disminución de la compresión Aorto-cava, mejora tanto el aporte de sangre a la placenta como la supresión de la congestión venosa42, es un recurso fácil pero muy olvidado en muchos de nosotros en presencia de un SFA.

2. Administración de Oxigeno Materno.

La colocación de una mascara facial con oxígeno, eleva la PO2 tanto en la madre como en el feto, mejorando incluso los porcentajes de saturación de oxígeno fetal, recordando que fracciones inspiradas de oxigeno (FIO2) por encima de 0.74 proporcionaran poca diferencia, ya que la placenta por su alto consumo de O2 presenta una especie de "techo" para el mismo43. Estas medidas son beneficiosas, incluso aquellas embarazadas de alto riesgo44.

3. Hidratación.

En algunas etiologías la administración de volúmenes de cristaloides como solución salina 0.9 o Ringer sin lactato, mejoran la hipotensión y disminuyen el compromiso fetal. Es primordial evitar o suspender la hidratación con soluciones que contenga dextrosa, ya que induciríamos hiperglicemia fetal, la cual en presencia de hipoxia desarrolla rápidamente acidosis metabólica incrementando el riesgo daño neurológico45. Por otra parte la Hiperglicemia fetal es relacionada con estados de hipoglicemia neonatal por fetal hiperinsulinismo46.

4. Suspensión de Oxitócicos, Intente Tocolísis.

El aumento del tono uterino generada por oxitócicos es otra causa de SFA, es muy común observar como son llevados al quirófano casos de hipertonía uterina con bradicardia fetal, en donde es continuada la infusión contentiva con estas drogas. Por otra parte existen estudios que tratan de proporcionar una Tocolísis inmediata con mínimos efectos colaterales. Para este propósito se ha empleado la Terbutalina por vía intravenosa a dosis de 0.25 mg. con excelentes resultados47.

Otros han señalado la efectividad de un potente vasodilatador como la Nitroglicerina con capacidad de aumentar la complianceuterina48 de manera rápida, 30 - 90 segundos posteriores a su administración, durante un periodo no mayor a 5 minutos, ha sido introducido en la practica obstétrica49, pudiéndose emplear tanto por vía intravenosa en bolos de hasta 180 mgr. o por vía sublingual50, debe estarse muy alerta a los efectos hemodinámicos que pudiesen aparecer con en el uso de esta droga.

Los efectos de la Nitroglicerina tanto en el FSC fetal como en la circulación materno-fetal en ovejas, fueron los propósitos del trabajo de Skarsgard y col51, encontrando que una dosis de 10 mgr./Kg./min., produce cambios significativos como son, un aumento en la frecuencia cardiaca materna y FCF, con una disminución en la presión arterial media materna y fetal. Sin embargo no fueron observadas en el feto variaciones del flujo sanguíneo de la Carótida, variabilidad del flujo o cambios en el metabolismo cerebral.

5. Amnioinfusión.

Este procedimiento realizado por el obstetra pudiese paliar la situación en aquellos casos donde existe compresión de una porción del cordón umbilical y será desplazada por la hidrostática que genera la colocación de solución salina intraútero. Esta practica además, pudiese diluir la viscosidad del liquido meconial, disminuyendo el riesgo de síndrome de aspiración meconial.

Esta técnica es asociada a bajo numero de complicaciones, sin embargo han sido reportados casos de embolismo de liquido amniótico, dehiscencia de segmento uterino, prolapso de cordón umbilical y sobredistensión uterina.

6. Tiempo Decisión - Extracción.

En caso de que las medidas anteriores no reviertan el cuadro de compromiso fetal o por el contrario la condición requiera una intervención inmediata, el tiempo establecido desde que se decide la cesárea hasta la extracción del feto no debe superar los 30 minutos si queremos reducir el riesgo de morbilidad y/o mortalidad, cabe destacar que durante este lapso no deben abandonarse las medidas de resucitación fetal.

Este tiempo máximo señalado (30 minutos), ha generado controversias, reiterando la imposibilidad de algunos equipos para alcanzarlos en diferentes maternidades y hospitales, convirtiéndolo en impracticable. Otra polémica surgida, son aquellos casos diagnosticados como Sufrimiento Fetal y cuyo tiempo decisión extracción superó los 30 minutos, no mostrando disminución significativa en valores gasométricos en arteria umbilical (pH y Excesos de Bases)52,53.

No hay duda que la asistencia ante una situación que comprometa la vida del feto, debe realizarse en el menor tiempo posible, idealmente menor a treinta minutos, sin embargo una prolongación circunstancial o fortuita de este periodo no ha sido evidencia de mayor deterioro gasométrico en algunos fetos54.


Agentes Anestésicos y Modelos Experimentales

Diferentes estudios, desde la década de los años 70 y principios de los 80 han examinado el comportamiento de los diferentes agentes anestésicos en el SFA, simulando hipoxia intrauterina mediante modelos animales, siendo la oveja la más utilizada.

Mediante la oclusión de cordón umbilical Pickering y col55, evalúa el Tiopental Sódico (TPS) y Ketamina, dividiéndolo en dos grupos: dosis altas (TPS 10 mg/Kg. y Ketamina 4 mg/Kg.) y dosis bajas (TPS 6 mg/Kg. y Ketamina 2 mg/Kg.), una vez alcanzado valores de pH en sangre fetal igual o menor a 7.20, las drogas eran dosificadas según su grupo, concluyendo que las bajas dosis de Ketamina como agente de inducción pudiesen ser preferibles a las de TPS en el feto con asfixia.

Empleando este mismo modelo pero con una variante en el desencadenante de la acidosis fetal, el pinzamiento de la arteria uterina Leicht y col56, utiliza TPS a 4 mg/Kg. y Ketamina a 3 mg/Kg., las cifras en FSC fetal como su consumo y aporte de oxigeno en los primeros 15 minutos posterior a la inducción con estas drogas no mostraron una diferencia significativa en ambos grupos. Cabe destacar que las dosis empleada Ketamina no son trasladable a la practica clínica a diferencia del TPS.

Swartz y col57 con igual diseño al de Leicht, investiga los cambios de la Ketamina tanto en la inducción como para el mantenimiento de la anestesia en fetos con pH entre 7.12 y 7.15. Posterior a una dosis de inducción de 3 mg/Kg., una segunda de 1 mg/Kg. era aplicada a los 10 minutos, monitorizándose la hemodinamia durante 15, concluyeron que este agente es seguro y no produce deterioro al estado inicial estudiado.

En modelo ovino sin asfixia ha sido investigado el comportamiento del Propofol, empleando una dosis de inducción de 2 mg/Kg. y luego diferentes grupos de mantenimiento, que fluctuaron entre 150, 300 y 450 mgr./Kg./min., asociado a una mezcla de Oxígeno y Óxido Nitroso al 50%, el equilibrio ácido-base y cardiovascular fetal no mostró efectos adversos o cambios significativos en comparación con el grupo control empleando TPS. Sin embargo, es resaltado el potencial riesgo de hipotensión y bradicardia severa materna observado durante el experimento cuando se administró Succinilcolina posterior a la dosis de inducción los autores advierten que estos resultados pueden diferir de aquellos con acidosis fetal o disminución del FSU por hemorragia materna<<sup>[58].

Los agentes Inhalatorios, también han sido evaluados en modelos de hipoxia en ovinos, Palahniuk y col59, mediante la oclusión del cordón umbilical y previa comprobación de acidosis en los fetos, suministraron a las madres Halotano y Oxígeno, observando una marcada hipotensión, incremento de la acidosis y disminución tanto del aporte como la demanda de oxígeno en el cerebro con caída del FSC en el feto. Estos autores por los resultados obtenidos, concluyen que existe un potencial daño neurológico fetal, derivado del efecto depresor cardiovascular fetal que indujo acidosis y reducción del FSC.

Otro grupo de investigadores con igual metodología para asfixia, examinó este agente, encontrando resultados diferentes a los de Palahniuk, concluyendo que el Halotano en bajas dosis, no produce alteraciones en el FSC fetal, incremento de la acidosis o cambios en el aporte de oxígeno al cerebro, cuando la duración de la anestesia sea menor a 15 minutos. Las diferencias en los resultados entre ambos estudios, son atribuidas a aspectos metodológicos, ya que en la primera experiencia emplearon altas concentraciones de Halotano (4%) antes de alcanzar la acidosis fetal (periodo de oclusión umbilical) y luego bajaron a las concentraciones del protocolo60.

Swartz y col, empleando Halotano en tres grupos de fetos asfícticos, un control sin anestesia (grupo A) y los otros dos previa a inducción con TPS a 3 mg/Kg. de peso, recibiendo uno de ellos una combinación de Oxígeno - Óxido Nitroso al 50% más Halotano 0.5 % (grupo B), mientras que la otra población recibía Halotano 1% con Oxígeno al 100% (grupo), durante 15 minutos en ambos grupos. Como hallazgo reportan, una disminución en la presión arterial media y Frecuencia Cardiaca pero sin cambios significativos en Gasto Cardiaco y FSC fetal en comparación con el grupo control, concluyendo que la anestesia general produce una abolición de la respuesta fetal al pinzamiento del cordón umbilical y no mejoraría la condición fetal, siendo esencial un rápido nacimiento61.

Mediante otro mecanismo de producción de acidosis en una población de 9 ovejas al final de la gestación Cheek, Hughes y colaboradores estudian la respuesta hemodinámica al Halotano, empleando la oclusión de la arteria uterina, esperaban la aparición d e bradicardia fetal o caída en un 50% del FSU. Con la utilización de microesferas evaluaron desde el FSC hasta la demanda y aporte de oxígeno a este órgano, encontrando que la administración de Halotano al 1% durante 15 minutos, no inhibe la respuesta fetal a la hipoxia y mantiene el FSC, aporte de Oxígeno y disminuye el consumo metabólico de oxígeno de la arteria uterina, no deteriorando los parámetros previos inducidos62.

El Baker y col.63examina elIsoflurano en SFA, posterior a la corroboración de acidosis fetal, ocho modelos animales son anestesiados con Isoflurane, evaluando tanto el equilibrio ácido-base como hemodinámico, obteniéndose un incremento en la acidosis fetal, redistribución del gasto cardiaco y se mantiene el balance entre el aporte y la demanda de oxígeno al cerebro.

Los Anestésicos Locales es el grupo de drogas más utilizadas en anestesia obstétrica también han sido estudiadas ante la hipoxia intrauterina. Friesen y col.64, investiga el comportamiento de la Lidocaína en la hemodinamia de fetos ácidoticos y no ácidoticos, hallando que concentraciones séricas de Lidocaína por debajo de 3.5 µg/ml. no producen cambios significativos en el flujo sanguíneo de fetos normales, mientras que las concentraciones de 1.4 -1.5 µg/ml., provocaban taquicardia con incremento del FSC en el grupo con acidosis.

Los estudios clásicos sobre esta droga en el SFA, son los realizados por el grupo de la Morishima y col65, quienes empleando dos series de fetos ácidoticos, a término y pretérmino, encontró una aumentada transferencia de la Lidocaína hacia los fetos maduros con acidosis, y que las bajas concentraciones de las mismas no alteran la respuesta a la asfixia. Un importante concepto que se deriva de este trabajo, es el denominado "atrapamiento iónico", donde drogas bases débiles, tipo anestésicos locales y opioides, cambian su polaridad al entrar en contacto con un medio ácido, reteniéndolo en el tejido o célula. En la segunda serie de Morishima66, los fetos pretérminos, exhibieron un incremento de la acidosis, aumento del PCO2 y caída de las perfusiones: cerebral, miocárdica y adrenal, perdiéndose la adaptación cardiovascular ante un fenómeno de asfixia y reduciendo el ya deteriorado bienestar fetal, situación no observada en los maduros.

En fetos prematuros y ácidoticos expuestos a Bupivacaína, los datos de Santos y col67 indican que se alteró "algo" de adaptabilidad cardiovascular ante una hipoxia leve o moderada, sin embargo las cifras sugieren que estas modificaciones pueden ser menos severas que las observadas en los pretérminos asfícticos con Lidocaína.

El tejido acidótico también tiene implicación en la cinética de los opioides, aumentado la transferencia placentaria madre-feto, en modelos de perfusión de placentas humanas68.


Manejo Anestésico

La temprana comunicación entre el Obstetra, Perinatólogo, Anestesiólogo y Neonatólogo, se considera la clave para anticiparse a cualquier eventualidad en la sala de partos, estableciendo la prontitud de medidas de reanimación fetal o intervención quirúrgica de acuerdo al grado de compromiso fetal y/o materno, así mismo trazar las estrategias que produzcan la mayor efectividad y el menor efecto colateral, dando respuestas rápidas en caso de que estas se presenten, contribuyendo a lograr un producto en las mejores condiciones generales posibles.

Debemos tener evaluadas todas aquellas pacientes que se encuentren en la sala de trabajo de parto, conociendo desde sus antecedentes médicos-quirúrgicos hasta su historia obstétrica, una buena venoclisis, posibilidad de profilaxis de la broncoaspiración y conocer la evolución del trabajo de parto a fin de evitar sorpresas al momento de tomar decisiones.

Tanto el quirófano como el personal del mismo, deben estar disponibles ofreciendo una respuesta rápida ante situaciones de compromiso de vida materno-fetal.

Harris69, define como una Cesárea de Emergencia, a todo aquel procedimiento no programado. Clasificándolas en tres categorías, como son Estable, Urgente e Inmediata.

Clasificación de Cesáreas Segmentarias de Emergencia
CATEGORIA EJEMPLOS ANETESIA
Estable Insuficiencia Placentaria crónica
Cesárea anterior(con o sin Trabajo de Parto)
Epidural, Espinal
Urgente Distocia
Placenta previa (NO SANGRANTE)
Pre-Eclampsia Severa
Corioamnionitis
Procidencia de Cordón Umbilical sin SFA
Epidural (con catéter previo)
Espinal
Emergencia Procidencia de Cordón Umbilical con SFA
Hemorragia Severa
SFA Agonizante
General

Otra clasificación más reciente propuesta es la propuesta por Lucas DN y col70, la cual fue realizada consultando entre 90 Anestesiólogos y Obstetras que gradaron 10 escenarios clínicos de acuerdo a 5 diferentes métodos de clasificación, estos últimos comprendían:

Escala Visual Análoga (EVA), técnica anestésica apropiada, tiempo máximo para el nacimiento, definiciones clínicas y una escala del 1 - 5, resultando en un sistema de clasificación de 4 grados.

Clasificación de las Cesáreas
Grado Situación
1 Amenaza inminente de la vida en madre o feto
2 Compromiso materno o fetal el cual no es una amenaza inminente de vida
3 Necesidad temprana de extracción pero sin compromiso materno o fetal
4 Caso programada con antelación por el equipo multidisciplinario de maternidad

Atendiendo a lo anteriormente expuesto debe poseerse un Quirófano equipado idóneamente como también el recurso humano capacitado, con disponibilidad inmediata, según las normas mínimas de la Confederación Latinoamericana de Sociedades de Anestesia (CLASA), es importante recordar que la paciente embarazada presenta una serie de modificaciones fisiológicas con implicaciones anestésicas muy importantes.


Técnicas Anestésicas

1. Anestesia Epidural

Esta técnica puede utilizarse sin mayores complicaciones en clasificaciones como la Estable (3 a 4 de Lucas), más controversial es su uso en los grados de Urgencia e Inmediata en donde puede emplearse si la paciente viene recibiendo analgesia previa por un catéter Peridural, y asociándolo a un anestésico local como la 2-cloroprocaína (amino-éster), que tiene la particularidad de un muy corto periodo de latencia.

Es posible observar como algunos anestesiólogos por acortar tiempo realizan este método de manera rápida y brusca, obviando pasos importantísimos de la técnica como son la dosis de prueba para descartar inyección accidental de duramadre o intravenosa, y el fraccionamiento de la dosis total. En ocasiones incrementando la velocidad de administración de la mezcla anestésica en el espacio epidural, conllevando a una súbita elevación de la concentración plasmática de los agentes en uso, esto origina acentuados efectos colaterales cardiovasculares en la madre con posible morbilidad fetal, a la vez de tener mayor concentración de droga en sangre, y el posible riesgo de una exposición del feto acidótico a la misma. El comportamiento de un anestésico local en el medio ácido es diferente, presenta mayor movimiento hacia tejidos ácidoticos71, y menor unión a proteínas72, generando mayor fracción libre con la posibilidad de desarrollar colapso cardiovascular y/o falla multiorgánica en vida postnatal.

Para evitar este posible incremento de niveles plasmáticos con Lidocaína por esta vía, es muy útil y ventajoso la asociación de Adrenalina, en concentraciones de 5 mg/ml., siendo efectiva tanto para producir una excelente densidad de bloqueo sensitivo como una disminución significativa del paso hacia el feto73. La adrenalina pudiese encontrarse en circulación sistémica y disminuir el FSU, empeorando el cuadro, sin embargo un modelo animal74 y observaciones clínicas75 rebaten este punto.

Otra práctica corriente en nuestros días, es la combinación de Clonidina- Lidocaína, buscando un efecto de potenciación con calidad de bloqueo sensitivo, sin embargo son múltiples los reportes clínicas que resaltan el efecto hipotensor, bradicardizante y sedación de esta droga en las embarazadas76, por lo que afectaría indirectamente el FSU y por lo tanto comprometería la vida fetal, sobretodo en donde ya existe una alteración de este tipo.

Es bueno recalcar que el uso de alcalinización para acortar el periodo de latencia, arroja resultados controversiales, no garantizando la obtención de bloqueo sensitivo en el tiempo deseado77, además de mayor efecto hipotensor78.

2. Anestesia Espinal

El espacio subaracnoideo presenta la característica anatómica de una bajísima absorción de medicamento hacia circulación sistémica, además de necesitarse bajos volúmenes como concentraciones de agentes anestésicos locales y opioides, un bloqueo sensitivo efectivo es establecido en breve tiempo (menos de 3 minutos), evita el fenómeno de atrapamiento iónico79.

Como desventajas de este procedimiento encontramos, limitación del tiempo anestésico, restringida o nula analgesia post-operatoria en comparación al sistema epidural continuo (estos inconvenientes pueden anularse mediante la colocación de un catéter epidural, técnica combinada espinal-epidural), así como un bloqueo simpático acentuado e impredecible, proporcionando una hipotensión marcada, debiéndose tratar rápidamente estos cambios hemodinámicos, evitando mayor hipoxia fetal. Otra condición adversa temible, es un bloqueo sensitivo y motor alto, provocando compromiso respiratorio, para esto debe utilizarse una velocidad de inyección bastante lenta, mayor a 1 ml en 10 segundos.

Chesnut80 recomienda el uso de esta técnica, para aquellos anestesiólogos ejercitados en conductivas (Residentes del 3er año del Post-grado en adelante), en pacientes con condiciones circulatorias estables o ausencia de hipotensión, empleo de agujas de calibre delgado 25 a 27 Gauge, empleo de Efedrina (bolos de 10 mg i.v.), administración de cristaloides i.v., lateralización del útero a la izquierda, manteniendo estas medidas, constituirá un método anestésico seguro como satisfactorio, y mínima incidencia de cefalea post- punción.

3. Anestesia General

Esta orientada exclusivamente hacia aquellos casos grado I (Inmediata), o cuando exista contraindicación de anestesia conductiva o falla de la misma.

Iniciarse con una inducción de secuencia rápida, salvo en casos de una vía aérea difícil, en donde una intubación despierta es mandatoria, para inducir se mantiene las opciones de TPS a dosis de 4 mg/Kg. (hipnótico de mayor uso), reservando la Ketamina a 0.5-1 mg/Kg., para aquellas situaciones con disminución del volumen intravascular por hemorragia o contraindicación de TPS.

El relajante neuromuscular (RM) de elección para intubación orotraqueal, continua siendo la Succinilcolina, este agente perteneciente al grupo de los despolarizantes, a dosis de 1.5 mg/Kg. no atraviesa la placenta ya que posee un alto grado de ionización, haciéndose impermeable para esta barrera y sin efectos en el Neonato8182, el otro grupo de RM, los No Despolarizantes, son moléculas, que por su tamaño atraviesan muy poco o nada la placenta, pero su indicación para intubación de secuencia rápida no es concluyente en Obstetricia, los mejores resultados los provee el Bromuro de Rocuronio a dosis de 0.9 mg/Kg. peso.

Es una preocupación para el Equipo que atiende a este binomio madre-feto, la posible depresión medicamentosa que pueden inducir ciertos agentes anestésicos, la farmacología es muy dinámica, variables como: dosis total, vía de administración, estado nutricional y gasto cardíaco, afectan el paso y efecto de la droga para la vida neonatal por una parte, mientras que por otra las características físico-químicas del fármaco son igualmente significativas. No hay un tiempo inflexible para la administración de un agente de inducción y la extracción del producto el cual garantice la ausencia de depresión farmacológica.

Otro concepto erróneo, es el de emplear mínimas dosis de agentes anestésicos en la inducción y no administrar ninguna droga de mantenimiento durante el periodo de incisión piel-nacimiento, con la presunción de que esta estrategia no ocasionará efectos deletéreos en el neonato (depresión), por el contrario este método no proporciona ni siquiera un mínimo nivel anestésico, teniendo a la paciente en condiciones infrahumanas por la presencia de dolor y estrés, las catecolaminas secretadas por esta causa, empeorara la condición del neonato ya que ocasionaran una vasoconstricción de las arterias uterinas83, disminución en el Flujo Sanguíneo Uterino (FSU) con la reducción del aporte de oxígeno al feto84. Igualmente incorrecta es la costumbre de administrar una anestesia general con la intención de provocar depresión respiratoria neonatal e impedir la Broncoaspiración de meconio, se debe recordar que esta broncoaspiración es iniciada intraútero mediante las degluciones fetales de líquido amniótico, y por otra parte la respuesta a depresión respiratoria por anestésicos es impredecible en las dosis administradas, dependiendo de una serie de variables antes mencionadas.

Aunque el tiempo quirúrgico de una extracción fetal por Cesárea segmentaria es bastante corto, la vigilancia de la ventilación materna durante el periodo inducción-nacimiento es de suma importancia en el bienestar fetal, ya que la hiperventilación puede conllevar a vasoconstricción de la arteria umbilical y desviación de la curva de la disociación de la hemoglobina hacia la izquierda, limitando la transferencia de oxígeno hacia el feto85, e igualmente un incremento excesivo en la presión ventilatoria, eleva la presión intratoráxica, disminuyendo el retorno venoso, con la consiguiente caída del FSU86.

El tiempo incisión uterina-extracción (mayor a 3 minutos) es otro factor vinculado con bajo pH en cordón umbilical como también menores puntajes de Apgar87.


Anestesia Espinal vs. General

Algunos especialistas han propuesto la ventaja de una anestesia espinal sobre la general para casos de emergencias obstétricas, una de ellas pudiese ser el SFA. Un estudio retrospectivo, evaluó a 137 embarazadas sometidas a cesáreas de emergencias, dentro de los objetivos estuvo la evaluación del tiempo decisión-incisión menor a 30 minutos, la anestesia espinal arrojó mayor proporción de pacientes por encima del tiempo establecido como ideal, pero recomendado precaución en la toma de decisiones de la técnica anestésica y posible riesgo- beneficio del tiempo expresado como idóneo88.


Conclusiones

Deben constituirse verdaderos equipos de trabajos, involucrando a las especialidades correspondientes y haciéndose extensiva al personal de enfermería, para detectar tempranamente con la mayor sensibilidad y especificidad los posibles casos de SFA, instalando los mecanismos de respuesta rápida y acertadamente. Formalizar un metódico seguimiento post-anestésico tanto a la madre como al neonato, construyendo así una base de datos más exacta, en donde los casos con asfixia perinatal sean discutidos por un comité plural, así el recurso humano en formación como sus instructores corregirán las deficiencias y podrán establecer pautas o metas. Solo este tipo de sistema proporcionará la abolición de practicas empíricas y rutinarias, como también el lograr el mayor objetivo a conseguir, que es la minimización de la morbi-mortalidad fetal y neonatal.


Bibliografía
  1. Parer JT, Livingston EG. What is fetal distress? Am J Obstet Gynecol 1990; 162:1421 - 1427.
  2. Diccionario Terminológico de Ciencias Médicas. 11 Edición. Barcelona (España): Salvat Editores; 1978.p.112
  3. Penning S, Garite TJ. Management of fetal distress. Obst Gynecol Clin North Am 1999; 26:259274
  4. Dellinger EH, Boehm FH. Emergency management of fetal stress and distress in the obstetric patient. Obst Gynecol Clin North Am 1995; 22:215-233.
  5. Low JA, Lindsay BG, Derrick EJ. Threshold of metabolic acidosis associated with newborn complications. Am J Obstet Gynecol 1997; 177:1391-1394.
  6. Leavit KA. Anesthesia and the Compromised Fetus. En: Norris MC, editor. Obstetric Anesthesia. 2nd ed. Philadelphia: Lippincott W&W; 1999.p.619-640.
  7. Boddy K, Dawes GS, Fisher R, Pinter S, Robinson JS. Foetal respiratory movements, electrocortical and cardiovascular responses to hypoxaemia and hypercapnia in sheep [resumen]. J Physiol (Lond) 1974; 243:599-618.
  8. Manning FA, Hill LM, Platt LD. Qualitive amniotic fluid volume determination by ultrasound: antepartum detection of intrauterine growth retardation. Am J Obstet Gynecol 1981; 139:254-8.
  9. Sütterlin MW, Seelbach-Göbel B, Oehler MK, Heupel M, Dietl J. Doppler ultrasonographic evidence of intrapartum brain-sparing effect in fetuses with low oxygen saturationaccording to pulse oximetry. Am J Obstet Gynecol 1999; 181:216-220.
  10. Willcourt RJ, Myers RE, de Courtens-Myers G, Artman SL, O´Shaughnessy RW, McDonald JS. Fetal care in labor and emergency delivery for fetal indications. En: Bonica JJ, McDonald JS, Editores. Principles and practice of Obstetric Analgesia and Anestesia. 2nd ed. Philadelphia: Williams & Wilkins; 1995.p. 1225-1239.
  11. Fujii EY, Takahashi N, Kodama Y, Roman C, Ferriero D, Parer JT. Hemodynamic changes during complete umbilical cord occlusion in fetal sheep related to hippocampal neuronal damage. Am J Obstet Gynecol 2003; 188:413-418
  12. Kryc JJ. Evaluation of the Pregnant Patient: Preoperative Concerns. En: Dewan DM, Hood DD, Editores. Practical Obstetric Anesthesia. Philadelphia W.B. Saunders Company; 1997.p. 19-47.
  13. Collea JV, Holls WM. The contraction stress test. Clin Obstet Gynecol. 1982; 25:707-717
  14. Vintzileos AM, Fleming AD, Scorza WE. Relationship between fetal biophysical activities and umbilical cord blood gas values. Am J Obstet Gynecol 1991; 165:707-713.
  15. Manning FA, Morrison I, Harmon CR, Lange IR, Menticoglu S. Fetal assessment by fetal BPS. Experience in 19.221 referred high-risk pregnancies. II. The false negative rate by frequency and etiology. Am J Obstet Gynecol 1987; 15: 880-84
  16. Phelan JP. Antepartum fetal assessment-newer techniques. Semin Perinatol 1988; 12:57-65.
  17. Smith CV, Phelan JP, Nguyen HN, Jacobs N, Paul RH. Continuing experience with the fetal acoustic stimulation test. [Resumen] J Reprod Med 1988; 33:365-8
  18. Tyrrell S, Obaid AH, Lilford RJ. Umbilical artery Doppler velocimetry as a predictor of fetal hypoxia and acidosis at birth. Obstet Gynecol 1989; 74:322-27
  19. Clarke VT, Smiley RM, Finster M. Uterine hyperactivity after intrathecal injection of fentanyl for analgesia during labor: a cause of fetal bradycardia? [Carta] Anesthesiology 1994; 81:1083
  20. Palmer CM, Maciulla JE, Cork RC, Nogami WM, Gossler K, Alves D. The incidence of fetal heart rate changes after intrathecal fentanyl labor analgesia. Anesth Analg 1999; 88:577- 81.
  21. Gambling DR, Sharma SK, Ramin SM, Lucas MJ, Leveno KJ, Wiley J et al. A randomized study of combined spinal-epidural analgesia versus intravenous meperidine during labor. Impact on cesarean delivery rate. Anesthesiology 1999; 89: 1336-1344.
  22. Van Velde M, Vercauteren M, Vandermeersch E. Fetal heart rate abnormalities after regional analgesia for labor pain: the effect on intratecal opioids. Reg Anesth Pain Med 2001;26:257-262
  23. Holdcroft A, Dob D. Regional analgesia for labour and fetal distress: culprit or innocent bystander. International Journal of Obstetric Anesthesia 2003;12:153-155
  24. Segal S, Csavoy AN, Datta S. The tocolytic effect of catecholamines in gravid rat uterus. Anesth Analg 1998; 87:864-869.
  25. Yoo KY, Lee JU, Kim HS, Jeong SW. The effects of opioids on isolated human pregnant uterine muscles. Anesth Analg 2001;92:1006-1009.
  26. Mardirosoff C, Dumont L, Boulvain M, Tramèr MR. Fetal bradycardia due to intrathecal opioids for labour analgesia: a systematic review. Br J Obstet Gynaecol 2002; 109: 274-281.
  27. Norris MC. Intrathecal opioids and fetal bradycardia: is there a link? International Journal of Obstetric Anesthesia 2000; 9:264-269.
  28. Huddleston JF. Intrapartum fetal assessment. A review. Clinics in Perinatology 1999; 26:549-568
  29. Parer JT, King TL. Electronic fetal monitoring And diagnosis of fetal asphyxia. En: Hughes SC, Levinson G, Rosen MA, editores. Anesthesia for Obstetrics. 4ta Edición. Philadelphia: LW&W: 2001.p.623-637.
  30. Fassett MJ. Fetal Herat rate monitoring for the anesthesiologist. Seminars in Anesthesia, Perioperative Medicine and Pain. 2000; 19:28-34.
  31. Lindsay MK. Intrauterine resuscitation of the compromised fetus. Clinics in Perinatology 1999; 26:569-584
  32. Wesgate J, Harris M, Curnow HSH, Greene KR. Plymouth randomised trial of cardiotocograma only versus ST waveform plus cardiotocograma for intrapartum monitoring: 2.400 cases. Am J Obstet Gynecol 1993;169:1151-1160.
  33. Norén H, Amer-Wáhlin I, Hagberg H, Herbst A, Kjellmer I, Marsál K et al. Fetal electrocardiography in labor and neonatal outcome: data from Swedish randomized controlled trial on intrapartum fetal monitoring
  34. Kühnert M, Seelbach-Göbel B, Butterwegge M. Predictive agreement between the fetal arterial saturation and fetal scalp pH: Results of the German multicenter study. Am J Obstet Gynecol 1998; 178:330-335.
  35. Garite TJ, Dildy GA, McNamara H, Nageotte MP, Boehm FH, Dellinger EH, et al. A Multicenter controlled trial of fetal pulse oximetry in the intrapartum management of nonreassuring fetal heart rate patterns. Am J Obstet Gynecol 2000; 183:1049-58.
  36. Kimble RM, Trudenger B, Cass D. Fetal defaecation: is it a normal physiological process. J Paediatr. Child Health 1999; 35: 116-9.
  37. Freeman JM, Nelson KB. Intrapartum asphyxia and cerebral palsy. Pediatrics 1988; 82: 240-9.
  38. Helwig JT, Parer JT, Kilpatrick SJ, Laros RK. Umbilical cord blood acid-base state: what is Normal? Am J Obstet Gynecol 1996; 174: 1807-12.
  39. Low JA. Intrapartum fetal asphyxia: definition, diagnosis, and classification. Am J Obstet Gynecol 1997; 176:957-9
  40. Goodwin TM, Belai I, Hernandez P, Durand M, Paul RH. Asphyxial complications in the term newborn with severe umbilical academia. AM J Obstet Gynecol 1992; 167:1506-12
  41. Huang CC, Wang SR, Chang YC, Lin KP, Wu PL. Measurement of the urinary lactate creatinine ratio for the early identification of newborn infant at risk for hypoxic-ischemic encephalopathy. N Engl J Med 1999; 341:328-35
  42. Eckstein K, Marx GF. Aorto-caval compression and uterine displacement. Anesthesiology 1974; 40: 92-6
  43. Ramanathan S, Gandhi S, Arismendy J, Chalon J, Turndorf H. Oxygen transfer from mother to fetus during cesarean section under epidural anesthesia. Anesth Analg 1982; 61:576-81
  44. Willcourt RJ, King JC, Queenan JT. Maternal oxygenation administration and the fetal transcutaneous PO2. Am J Obstet Gynecol 1983; 146:714-5.
  45. Blomstrand S, Hrbek A, Karlsson K, Kjellmer I, Lindercrantz K, Olsson T. Does glucose administration affect the cerebral response fetal asphyxia? [Resumen] Acta Obstet Gynecol Scand 1984; 64:345-53.
  46. Philipson EH, Kalhan SC, Riha MM, Pimentel R. Effects of maternal glucose infusion on fetal acid-base status in human pregnancy. Am J Obstet Gynecol 1987; 157:866-73
  47. Ingemarsson I, Arulkumaran S, Ratnam SS. Single injection of terbutaline in term labor. Effect on fetal pH in cases with prolonged bradycardia. Am J Obstet Gynecol 1985; 153:859-65
  48. Langevin PB, Katovich MJ, Wood CE, James CF, Langevin SO. The effect of nitroglycerin on the gravid uterus in sheep and rabbits. Anesth Analg 2000; 90:337-43.
  49. Vinatier D, Dufour P, Berard J. Utilization of intravenous nitroglycerin for obstetrical emergencies. Int J Gynaecol Obstet 1996; 55:129-34
  50. Bell E. Nitroglycerin and uterine relaxation. [Carta]. Anesthesiology 1996; 85:683
  51. Skarsgard ED, VanderWall KJ, Morris JA, Roman C, Heymann MA, Harrison MR. Effects of nitroglycerin and indomethacin on fetal-maternal circulation and fetal cerebral blood flow and metabolism in sheep. Am J Obstet Gynecol 1999; 181:440-445.
  52. Chauhan SP, Roach H, Naef II RW, Magann EF, Morrison JC, Martin JN. Cesarean section for suspected fetal distress. Does the decision-incision time maker a difference? J Reprod Med 1997; 42:347-52.
  53. MacKenzie IZ, Cooke I. Prospective 12 month study of 30 minute decision to delivery intervals for “emergency” caesarean section. BMJ 2001; 322:1334-1335.
  54. James D. Caesarean section for fetal distress. BMJ 2001; 322:1316-1317.
  55. Pickering BG, Palahniuk RJ, Coté J, Wade JG, Pasha MG. Cerebral vascular responses to ketamine and thiopentone during foetal acidosis. Can Anaesth Soc J 1982; 29:463-467.
  56. Leicht CH, Baker BW, Rosen MA, Field DR, Dailey PA, et al. The effect of ketamine or sodium thiopental rapid sequence induction on the asphyxiated fetal lamb [Resumen]. Anesthesiology 1986; 65: A387
  57. Swartz J, Cumming M, Biehl D. The effect of ketamine anaesthesia on the acidotic fetal lamb. Can J Anaesth 1987; 34:233-7
  58. Alon E, Ball RH, Gillie MH, Parer JT, Rosen MA, Shnider SM. Effects of Propofol and thiopental on maternal and fetal cardiovascular and acid-base variables in pregnant ewe. Anesthesiology 1993; 78:562-76.
  59. Palahniuk RJ, Doig GA, Johnson GN, Pash MP. Maternal halothane anesthesia reduces blood flow in the acidotic sheep fetus. Anesth Analg 1980; 59: 35-39.
  60. Yarnell R, Biehl DR, Tweed WA, Gregory GA, Sitar D. The effect of halothane anaesthesia on the asphyxiated foetal lamb in utero. Can Anaesth Soc J 1983; 30: 474-479.
  61. Swartz J, Cummings M, Pucci W, Biehl D. The effects of general anesthesia on the asphyxiated foetal lamb in utero. Can Anaesth Soc J 1985; 32:577-582.
  62. Cheek DB, Hughes SC, Dailey PA, Field DR, Pytka S, Rosen MA, et al. Effect of halothane on regional cerebral blood flow and cerebral metabolic oxygen consumption in the fetal lamb in utero. Anesthesiology 1987; 67:361-6.
  63. Baker BW, Hughes SC, Shnider SM; Field DR, Rosen MA. Maternal anesthesia and the stressed fetus: effects of isoflurane on the asphyxiated fetal lamb. Anesthesiology 1990; 72:65-70.
  64. Friesen C, Yarnell R, Bachman C, Meatheral R, Biehl D. The effect of lidocaine on regional blood flows and cardiac output in the non-stressed and the stressed foetal lamb. Can Anaesth Soc J 1986; 33:130-7.
  65. Morishima HO, Santos AC, Pedersen H, Finster M, Tsuji A, Hiraoka H, et al. Effect of Lidocaine on the Asphyxial responses in the mature fetal lamb. Anesthesiology 1987; 66:502-507.
  66. Morishima HO, Pedersen H, Santos AC, Schapiro HM, Finster M, Arthur GR et al. Adverse effects of maternally administered lidocaine on the asphyxiated preterm fetal lamb. Anesthesiology 1989; 71:110-115.
  67. Santos AC Yum EM, Bobby PD, Noble G, Arthur GR, Finster M. The effects of bupivacaine, L-nitro-L-arginine-methyl ester and phenylephrine on cardiovascular adaptations to asphyxia in the preterm fetal lamb. Anesth Analg 1997; 85: 1299-306.
  68. Johnson RF, Herman N, Arney TL, Johnson HV, Paschall RL, Downing JW. The placental transfer of sufentanil: effects of fetal pH, protein binding, and sufentanil concentration. Anesth Analg 1997; 84:1262-8
  69. Harris AP. Emergency cesarean section. En: Rogers MC, editor. Current Practice in Anesthesiology. Toronto: BC Decker; 1990.p. 361-366.
  70. Lucas DN, Yentis SM, Kinsella SM, Holdcroft A, May AE, Wee M, Robinson PM. Urgency of caesarean section: a new classification. J R Soc Med 2000; 93:346 –350.
  71. Johnson RF, Herman NL, Johnson HV, Arney TL, Paschall RL, Downing JW. Effects of fetal pH on Local Anesthetic transfer across the human placenta. Anesthesiology 1996; 85:608-615.
  72. McNamara PJ, Slaughter RL, Pieper JA, Wyman MG, Lalka D. Factors influencing serum protein binding of lidocaine in humans. Anesth Analg 1981; 60:395-400
  73. Abboud TK, David S, Naggapala S, Costandi J, Yanagi T, Haroutunian S et al. Maternal fetal and neonatal effects of lidocaine with and without epinephrine for epidural anesthesia in obstetrics.Anesth Analg 1984; 63:973-79.
  74. Norris MC, Grieco W, Arkoosh VA. Does continuous intravenous infusion of low-concentration epinephrine impair uterine blood flow in pregnant ewes? Reg Anesth 1995; 20:206-211
  75. Ramanathan S, Desai NS, Zakowski M. Systemic vascular uptake of epinephrine from epidural space in parturients in emergency in cesarean section. Reg Anesth 1995; 20:199-205
  76. Paech MJ, Pavy TJG, Orlikowski CEP, Evans SF. Patient controlled epidural analgesia in labor: the addition clonidine to bupivacaine-fentanyl. Reg Anesth Pain Med; 2000: 34-40
  77. Chassard D, Berrada K, Boulétreau P. Alcalinisation des anesthesiques locaux théoriquement justifiée mais inutile cliniquement. Can J Anaesth 1996; 43:384-393.
  78. Parnass SM, Curran MJA, Becker G. Incidence of hypotension associated with epidural anesthesia using alkalinized and nonalkalinized lidocaine for cesarean section. Anesth Analg 1987; 66:1148-50.
  79. Marx GF, Luykx WM, Cohen S. Fetal-Neonatal status following caesarean section for fetal distress. Br J Anaesth 1984; 56:1009-1013.
  80. Chesnut DH. Anesthesia for fetal Distress. En: Chesnut DH, editor. Obstetric Anesthesia Principles and Practice. St. Louis: Mosby-Year Book; 1999.p.493-507.
  81. Backus AM. Muscle relaxants during pregnancy and the puerperium. Seminars In Anesthesia 1995; 14:301-307.
  82. Hughes SC, Levinson G, Rosen MA. Anesthesia for cesarean section. En: Hughes SC, Levinson G, Rosen MA, editores. Anesthesia for Obstetrics. 4ta Edición. Philadelphia: LW&W: 2001 . p.623-637.
  83. Shnider SM, Wright RG, Levinson G, Roizen MF, Wallis KL, Rolbin SH, Craft JB. Uterine blood flow and plasma norepinephrine changes during maternal stress in the pregnant ewe. Anesthesiology 1979; 50:524-27
  84. Morishima HO, Pederson H, Finster M. Influence of maternal physiologic stress on the fetus. Am J Obstet Gynecol 1978; 131:286-90.
  85. Motoyama EK, Rivard G, Archeson F, Cook CD. The effect of changes in maternal pH and PCO2 on the PO2 of fetal lambs. Anesthesiology 1967; 28: 891-903.
  86. Levinson G, Shnider SM, deLorimier AA, Steffenson JL. Effects of maternal hyperventilation on uterine blood flow and fetal oxygenation and acid-base status. Anesthesiology 1974; 28:340-7
  87. Datta S, Ostheimer GW, Weiss JB, Brown WU Jr, Alpher MH. Neonatal effect of prolonged anesthetic induction for cesarean section. Obstet Gynecol 1981; 58:331-5
  88. McCahon RA, Catling S. Time requerid for surgical readiness in emergency caesarean section: spinal compared with general anaesthesia. International Journal of Obstetric anesthesia 2003; 12:178 -182.